Primer
contacto con Trinidad: noche de mi primer sábado. Me dicen que me llevan a "las
cuevas", y resulta ser una discoteca llamada Ayala, hecha en unas cuevas naturales, y
que pagas 10 dólares por entrar, teniendo luego barra libre hasta la expulsión de dicho
antro. Música: desde Bisbal hasta Alex Ubago pasando por Salsa, música ochentera y algo
de bakalao. La música Cubana brilla por su ausencia, y yo decido explotar la barra libre
trincándome algo así como 7 u 8 cubalibres en las 4 horas que allí estuvimos. Los
demás optan por guarreridas tipo piña colada y daikiri, y en el retorno en nuestro
chevrolet hay más de una parada para esperar que se calmen algunos desórdenes
estomacales. Yo aguanto como una campeona, y Silvia comienza a decir que no soy humana.
En esta foto salen Lisbeth y Yusel (creo que se escribe así), ambos cubanos, amigos de esta gente. Y Silvia, por supuesto, con cara de borrachuza....
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Aquí Silvia con el padre de Christian, un argentino que sale más adelante. Este muchacho
acababa de acabar la carrera y volvía a la Patagonia en breves, y su padre había ido a
pasar unos días allí para luego volver juntos.
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Debajo, el otro Australiano en animada conversación con el padre argentino y con mi coleguita Silvia. Se ve que los cubalibres comienzan a afectarme, porque esta ya está un poquito desenfocada... En la de al lado podemos ver al padre e hijo argentinos en un estado ya bastante etílico... |
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Bueno,
unas dos semanitas después de esta juerga loca, retornamos a Trinidad, pero ya para pasar
unos días allí. Atrás quedó finalmente Sancti Spiritus (sobre todo), pero también
Santiago de Cuba, Santa Clara, Holguín, Varadero... llegamos un sábado en un taxi que
nos costó 10 dólares, y yo me pasaría en Trinidad hasta el martes, aunque mis
compañeros/as se fueron entre la noche del domingo y la mañana del lunes. Estas fotos
son de la primera noche: en la primera el rasta aporrea una expecie de xilófono que les
pidió a unos italianos (De Florencia, para más información); mientras que las otras dos
son en la casa de la música, que ya he dicho antes que siempre hay espectáculos de baile
de salsa y canciones... a mí me gusta mas la casa de la trova, pero bueno. La otra foto
de abajo, Silvia querrá matarme cuando vea que la he colgado, pero si he sacado la mía
de los dientes... que conste que se la sacaron ellos mismos...
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Abajo,
a la izquierda, una ducha que te torras de primeros de siglo. Ese es el museo de la
arquitectura, que en realidad era la casa de un tipo rico; y donde te hablaba un poco de
las "hechura" de las casa coloniales que hay en Trinidad.
La otra foto, a la derecha, es la entrada al pueblo; y es que hicimos una expedición en busca de un río que no encontramos (perdón, el río si lo encontramos, pero no encontramos un lugar en donde bañarnos), y aprovechamos para sacar un par de fotillos... Luego, la foto de la terraza fue en un bar que se llamaba el "daikiri", con dos amigos del rasta... |
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Las fotos de arriba las tomamos en la
habitación de nuestra casa particular; se ve que Vader ya pilló el callo con lo de
autosacar las fotos. Y ahora llega mi periplo particular:
El lunes por la mañana me contraté una excursión a caballo por el valle de los ingenios y para ver una cascada. Los primeros pantalones que pillé en la oscuridad del cuarto fueron los cortos; y dado que me iba a bañar en una poza, decidí llevarme las chanclas. Apareció un caballero con un caballo a buscarme (no es tan romántico como parece: parecía mas una mula que un caballo, y lo llevaba caminando agarrado de las bridas) y ahí que me fui al encuentro con Luna, mi propio caballo. Había allí además una pareja de catalanes: Xabi y Rusé, y ahí que comenzamos nuestro camino. La parte buena: un refrescante baño en una poza. Lo de cascada habría que verlo: vamos, ni de coña. Un chorrillo y vas que chutas. La mala: ir montada en el caballo bajo un sol ardiente, con la garganta absolutamente reseca y sin nada que beber; y con un dolor horrible en todos los músculos del cuerpo. El Xabi iba bien, salvo por el calor que decía que tenía; y la catalana decía que la dolían los músculos, pero es que yo estaba absolutamente horrible. Pensaba yo: "vaya floja de mierda" y vacilaba diciendo que es que los vascos servimos para levantar piedras, pero no para montar a caballo. Bueno, pues según llegué a la casa donde estaba el establo, me trinqué 2 vasazos de agua fresca, y cuando al fin llegué a mi casa, otro medio litro casi de seguido. El análisis global de daños fue el siguiente:
Conclusión: Noelia no puede moverse de casa en todo el día. Se tira algo así como 16 horas durmiendo a cachitos hecha una mierda. |
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Al día siguiente, con unas agujetas
considerables, Silvia llama a la casa y le dice a la propietaria que tengo que ir a
buscarla al cupé, que es una gasolinera a las afueras del pueblo. Felipa, la señora de
la casa, me envía en una dirección con unas indicaciones, diciéndome que tardaré del
orden de 10 o 15 minutos. No solo tardo 25 a paso vivo, sino que encima me ha mandado a
otra gasolinera. Teniendo en cuenta que acarreo a hombros la mochila con todas mis
pertenencias, intercepto un carretón de mula que me lleva hasta el cupé de verdad por el
precio que yo quiera darle. El hombre se ha salido de su ruta y ha sido un encanto. Como
la gente suele darle dos pesos, yo le doy cinco pesos. Me dice que está bien. Me
encuentro a Silvia, nos recoge la guagua y nos dicen que tienen que hacer unas
gestiones.
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En
consecuencia nos dejan en el museo de los bandidos, que tiene una torre con unas vistas
estupendas (véanse las fotos) para que hagamos tiempo. Una vez recogidas de nuevo y
llegadas a Tope de Collantes (luego se verá qué verdor... ) el clima ha cambiado
bastante. Temperatura "fresca" (o sea, para ir en manga corta en vez de en
tirantes) pero descubro que tengo escalofríos. siento que me arde la frente, y deduzco
que lo que el día anterior yo tenía era fiebre. Me pongo el termómetro y me descubro
con 39 grados. ¡¡Horreur!! me tomo un paracetamol italiano y nos vamos a que me mire un
médico. Tras auscultarme, preguntarme si soy asmática y decirme que debería cuidarme el
pecho (yo ya llevo a estas alturas dos días sin fumar ná de ná) me dice que tengo una
bronquitis, y que tengo que tomar 7-10 días de antibiótico. Como solo tengo para 7, 7
fueron.
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