Christchurch   

Nos metimos en el cogollito de la ciudad más grande de la isla sur con la van sin mayores consecuencias catastróficas. Me explico: lo de conducir por la izquierda está muy bien y es muy fácil por carreteras generales, pero en las ciudades grandes, con la copilota guiándome por calles llenas de coches, desvíos, semáforos y rotondas, me acojono un poco. Pero bueno, parece que estábamos inspiradas, porque no me pitó nadie y aparcamos en el parking Oxford, en el centro de la ciudad, al lado de la plaza de la catedral.

Esta es la Catedral

    Justo allí vimos un tranvía antiguo que te iba llevando por la zona más bonita y lo cogimos... cuando llegamos a una callecita que decía que era de estilo español, de casas bajitas y multicolores, nos paramos para tomar un potecillo y luego seguimos pateando. A mí la ciudad me gustó: tal vez por lo breve de la estancia y por la poca costumbre de lo de los edificios antiguos.

    Además, conseguimos encontrar a Julie, la moza que habíamos conocido en Westport, y nos dejó darnos una ducha, cenamos allí y luego dormimos en una habitación. Más maja......

Ir a la siguiente página